jueves, 2 de septiembre de 2010
Hace frío...
La noche rojiza se abre misteriosa
sobre el vasto cielo sin estrellas.
Jirones de niebla enredándose
en las retorcidas ramas de los árboles.
Y mi eterna pregunta sin respuesta:
¿Quién se irá primero?, ¿Tú o yo?
Muchas noches he vivido en sueños.
Esta noche.
Allí estas tú, amo y dueño,
bajo la luz mortecina de las velas,
mis ojos fijos como fantoche
en el reflejo hiriente de los tuyos.
Pero qué importa... ya termino,
ya me voy sin la respuesta
y tú no estás conmigo,
al acecho el final se apresta.
Cada noche es como ésta,
Cierro los ojos y muero una vez
y otra vez...
¡Muchas veces!
Sin poderte sorprender.
No como tú, sin dobleces,
con tu sola y única muerte.
Moriré cada anochecer,
moriré con tu recuerdo.
Sin ruidos, ni quejas.
Sin amanecer.
0 comentarios:
Publicar un comentario